martes, 26 de abril de 2011

Madrid inundado-Madrid real. Laura.C 1ºB.

Rafael Reig toma como iniciativa construir la novela de Sangre a borbotones en un Madrid diferente, curioso, pero sobre todo, inundado por todas partes.
De repente el petróleo ha desaparecido y no usan transportes tales como el coche o el autobús, la gente anda acostumbrada a moverse en bicicletas,en orbeas,como la de Carlos Clot, de un lado hacia otro, se dirigen hacía sus lugares habituales acompañados de estos transportes.
Sin embargo, en un Madrid actual, los ciudadanos no pueden vivir sin su transporte, ya sea coche o autobús... contaminante y lascivo que todo el mundo utiliza, y que nosotros en un par de años usaremos,tomando el control de un medio que perjudica al medio ambiente y que desde luego, no nos pararemos a pensar en ello cuando nos decidamos a comprar un coche.
En un Madrid inundado, en Atocha, en la Castellana, donde el agua llega incluso más allá de los tobillos, es imposible la existencia de ningún vehículo, sin embargo en un Madrid como el nuestro, en un Madrid real, sin duda no veremos más bicicletas que coches furulando por ahí.
Opino que la semejanza entre estos dos Madriles es que los ciudadanos se acostumbran a lo que sea, e intentan ser felices, ya sea en calles inundadas, o contaminadas por ruido y gases tóxicos. Todo el mundo se hace a su ambiente, a su alrededor, y convive en su entorno como puede, porque todos nos acostumbramos a lo que nos rodea y a lo que nos venga.
¿ Y tú, serías capaz de hacerte a una ciudad inundada , a pasear con barcas y barquitas? Yo sí.

Laura Carmona 1ºB






4 comentarios:

Óscar dijo...

Hola Laura,

Has escrito una entrada realmente interesante: ¡enhorabuena y gracias por decidirte a ser la primera en participar en el blog!

Quería preguntarte a tí, y a todo el que se anime a responder, si os ha parecido creíble o no el Madrid que describe Rafael Reig. ¿Es posible detectar algún detalle incoherente que lo haga inverosímil, o podría resultar posible? (No me refiero a los sucesos fantásticos que acontecen en la novela, sino sólo a la ambientación).

A raíz de tu comentario he pensado también en otro detalle que no había tenido en cuenta. Un Madrid inundado ofrece muchas más posibilidades de ambientación y situaciones a una novela negra, ¿se os ocurre algún espacio típico de este género que no sería posible en un Madrid de secano?

Alumno 1 Bach IES Las Américas dijo...

¡ Yo me animo a responder ! Ya que nadie lo hace, y diré que no me resultó nada creíble el lugar de ambientación de la novela de Rafael Reig, sin embargo, que no me resultase creíble nos significa que no me haya gustado, ya que quedaba muy bien ver como Carlos Clot se desenvolvía en este ambiente. Por supuesto que no es posible, un Madrid inundado no lo veremos en la vida, y eso todo el mundo lo sabe,pero, ¿ Ya hay ciudades así verdad ?
Supongo que mucha idea sobre espacios típicos de novelas negras no tengo,por que a decir verdad, ésta es la primera que leí. Pero si yo fuese escritora de este tipo de novelas, siendo protagonista, y por lo tanto detective, probablemente imaginaría un Marte o una Luna donde tenga que resolver casos tan extraños como " Alienígenas desaparecidos por la probable absorción de agujero desconocido, o, miles de asesinatos por parte de mutantes que no quieren turistas por aquí".
Gracias por tu comentario, enhorabuena por tu bebé, y un saludo !

Gestión Blogs IES Las Américas dijo...

Si mezclas los argumentos de detectives con los ambientes de ciencia ficción tendrías asegurado el éxito como escritora, Laura. Además, me pareció genial como adaptaste la forma de hablar de Carlos Clot en tu otra entrada. No digo más.

Tienes razón al comentar que hay ciudades prácticamente inundadas como Amsterdam o Venecia que al estar entre la tierra y el mar poseen un misterio especial que favorece la intriga. Yo había pensado en las posibilidades que ofrece a los mafiosos un canal, o el mar, a la hora de deshacerse de individuos incómodos "comprándoles unos zapatos de cemento" y lanzándolos al agua. Los muelles son también escenarios misteriosos.

Gestión Blogs IES Las Américas dijo...

Se me olvidó poner mi identidad: Óscar