domingo, 19 de junio de 2011

Miriam Almohalla 1ºD

¿Retromodernismo o modernismo anticuado? He ahí la cuestión. Esta pregunta me hacía yo. No recuerdo si en algún punto concreto de la novela se habla sobre la fecha real en que se sitúan los hechos, es un futuro, pero excepto por unos cuantos detalles, esto podría no ser así.
Me explico, y expongo mi teoría: que nuestro protagonista vaya siempre en bicicleta, ¿no nos recuerda un pasado en el que no había motores? sí, pero hay un pequeño fallo en esto y es que hay un "cementerio de automóviles", pero también podrían ser restos de bicicletas o de tranvías. Otro punto que nos hace retroceder es imaginar los tranvías como trenecitos de madera del pasado en un Madrid antiguo de principios del XX. Además, y por último, tenemos la oficina de Carlos Clot, que según estaba dispuesta, a mí me recuerda a la del típico y clásico detective americano de siempre, ¿un fichero? vamos, dentro de unos años, todo estará informatizado, ¿una lamparita de mesa? eso suena a pasado. Pero claro, después encontramos la teoría futurista: un español-anglosajón, baastante factible ya que cada vez hay más anglicismos, y, lo que más razón le da a la visión futurista es la empresa de Chopeitia Genomics. Es paradójico, ¿no creéis?.

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